Cirugía de la piel


 Mediante la cirugía dermatológica se pueden  tratar lesiones benignas comunes como los lunares, quistes, fibromas o las verrugas seborreicas. El cáncer de piel, cada vez más frecuente por el envejecimiento de la poblacion y los habitos de exposición solar, también forma parte del tratamiento quirúrgico dermatológico.

La reparación de la piel, una vez eliminada la lesión, se puede realizar mediante la sutura directa de la herida, mediante el desplazamiento de la piel adyacente para cubrir el defecto, mediante injerto de piel obtenido de otro lugar  o dejar que se cure por segunda intención sin aplicar ninguna sutura.

Es necesaria una formación quirúrgica específica  además de unas instalaciones perfectamente acondicionadas para el tratamiento quirúrgico de los problemas dermatológicos.